VeCuadro surgió a finales del 2011 a raíz de la iniciativa Synch 1.0 del centro Fluxart Laboratorio de Creación Contemporánea, que pretendía de unir a artistas de disciplinas dispares para la creación de un proyecto común. Así, fueron seleccionados y puestos en contacto:
Javier Luri (fotografía y escultura)
Jose Carlos Torres (diseño y música)
Paula Ducatenzeiler (videoperformance y artes escénicas)
Del encuentro saldría, dos meses después, la exposición de una obra multidisciplinar creada desde cero por los tres artistas que puso en contacto Fluxart, pero también se inauguró con ello VeCuadro, un grupo de trabajo que, una vez en marcha, no quiso conformarse solo con esa primera experiencia creativa.
Sincronizarse en un proyecto común varios artistas sin conocerse de nada supone una lógica dificultad, pero también un inspirador silencio sobre el que construir totalmente desde cero una obra nueva, capaz de descontextualizar a los artistas individuales para llevarlos a un lugar a estrenar: un espacio sin anfitrión ni invitados, donde existe la aventura de dejar atrás otros hogares para poder replantearse dónde y cómo acomodarse cada uno en esta nueva arquitectura por diseñar.
Pronto aparecieron zonas comunes, técnicas y estilos compartidos, que permitieron ir definiendo qué es lo que se quería hacer.
La música resultó ser el segundo idioma de todos, una lengua común para los tres que permitió empezar a articular el proyecto. Los tres dialectos diferenciados iban de lo electrónico a lo más acústico, animando a convivir samples con teclados, percusión y violín. El espíritu mestizo de todos condujo a la creación de sonidos experimentales.
La imagen fue el segundo pilar comunitario. Retando a combinar el diseño con las artes escénicas, la proyección audiovisual y las inquietudes escultóricas.
El resultado de estas fusiones dio lugar a la idea del mapeo 3D, la video creación y la música experimental, en una conjunto performativo.